Si ha tenido una buena visión durante la mayor parte de su vida, pero recientemente ha notado que algo anda mal, es posible que tenga un cambio en su graduación y hay que comprobar si necesitas lentes graduados.
La pérdida de la visión suele ser gradual, lo que a veces significa que una persona realmente no se da cuenta. No tomarse en serio los problemas de visión y retrasar el uso de gafas puede provocar fatiga visual, fatiga visual, lágrimas o dolores de cabeza a corto o medio plazo, y otros problemas más graves a largo plazo.
Señales que indican que necesitas gafas
Una vez descartadas las molestias transitorias, nuestro consejo es que acudas a la óptica cuando hayan pasado varios días desde que empieces a notar alguno de estas manifestaciones:
- Cansancio y ojos rojos.
- dolor de cabeza frecuente.
- Problemas de mareos con la visión de cerca o de lejos.
- Visión borrosa o doble.
- Mala percepción de la distancia.
- Necesidad de más luz para ver bien y, por lo tanto, dificultades para distinguir objetos por la noche.
Gradúa tus lentes con profesionales en salud visual
Corregir la vista y determinar las dioptrías de afinación necesarias de unos lentes no es fácil. El principal motivo es que en muchos casos será necesario corregir dos aberraciones distintas, siendo ejemplos habituales la miopía y el astigmatismo. Una persona sin experiencia ni siquiera pensará en esta posibilidad y no podrá encontrar lentes correctivos que le permitan ver con claridad. Además, el cuidado de los ojos es muy importante, por lo que siempre debemos confiar nuestra visión a especialistas.
En Óptica Visión 2000 contamos con capacitación especial para realizar exámenes de la vista, recomendar lentes y ejercicios para el cuidado visual.
Nuestra experiencia profesional nos permite asesorarte íntegramente para saber el tipo de lente que necesitas y las gafas adecuadas para ti.